MELINDRES DE MELIDE

Las hojas amarillas caen en la alameda,
en donde vagan tantas parejas amorosas.
Y en la copa de Otoño un vago vino queda
en que han de deshojarse, Primavera, tus rosas.

                                                             "VERSOS DE OTOÑO" de RUBÉN DARÍO

La Real Academia los define así:
"Fruta de sartén, hecha con miel y harina".
"Dulce de pasta de mazapán con baño espeso de azúcar blanco, generalmente en forma de rosquillas muy pequeñas".

En ninguno de los casos reconozco los melindres que a mi me gustan:  pequeños, en forma de rosquillas (casi sin agujero) y envueltos en una pasta dulce y dura. Y como tantas otras veces, me he puesto manos a la obra para tratar de hacer nada más, ni nada menos que mis favoritos....¡melindres de Melide!, tal como los que veis en la foto.

INGREDIENTES:
6 yemas de huevo
50 gr de mantequilla
50 gr de azúcar
50 ml de anís
200 gr de harina
Una pizca de canela
1/2 sobrecito de levadura "Royal"

Para el baño:
250 gr de azúcar
100 ml de agua
50 ml de anís

MODO DE HACERLO
Mezclamos la mantequilla derretida con el azúcar, añadimos las yemas de huevo, el anís y la canela. Por último la harina mezclada con el "Royal". Amasamos hasta que no se nos pegue a las manos. Dejamos reposar media hora. A continuación cogemos porciones de masa, hacemos un rulo y lo enrollamos en un dedo haciendo rosquillas. Las vamos colocando sobre la bandeja del horno cubierta con papel sulfurizado y las dejamos reposar 10 minutos más. Precalentamos el horno a 200º, bajamos a 180º  y metemos las rosquillas durante 10 minutos. Las dejamos enfriar.
Cuando ya estén frías preparamos el almíbar, a punto de hebra, para el baño. Con estas cantidades es suficiente que hierva 2 minutos (a toda pastilla) para alcanzar este punto.Metemos las rosquillas en un bol, echamos el almíbar sobre ellas y revolvemos para que se impregnen todas por igual. Cuando veamos que se pegan unas a otras, las vamos sacando una a una (con unas pinzas de cocina, si no queréis quedaros sin huellas dactilares "pa" los restos), las ponemos a escurrir sobre la rejilla del horno y ésta a su vez sobre la bandeja.
Dejamos que sequen bien de un día para otro. Se conservan mucho tiempo en una caja hermética.





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