Mientras
yo presienta que eres y te llamas
así, con ese nombre tuyo
tan pequeño,
seguiré como ahora, amada
mía,
transido de distancia,
bajo ese amor que crece y no se muere,
bajo ese amor que sigue y nunca acaba.
yo presienta que eres y te llamas
así, con ese nombre tuyo
tan pequeño,
seguiré como ahora, amada
mía,
transido de distancia,
bajo ese amor que crece y no se muere,
bajo ese amor que sigue y nunca acaba.
Yo ya tengo muchos años para que me cuelen lo del día de los enamorados, no obstante, creo que cualquier fecha es buena para decir a la persona amada, que tu amor crece y no se muere, que sigue y nunca acaba, tal como nos recuerda el poeta en la última estrofa de "MIENTRAS TU EXISTAS".
Y como el movimiento se demuestra andando, hoy nos ponemos estupendos y preparamos un postre especial con mucho, mucho chocolate. Es muy sencillo de hacer, pero requiere tiempo.
INGREDIENTES:
3/4 de litro de leche
3/4 de litro de nata o 3 tarrinas de 250 g cada una de queso "Philadelphia"
3 sobres de cuajada en polvo
100 g de azúcar
150 g de chocolate negro
150 g de chocolate con leche
150 g de chocolate blanco
MODO DE HACERLO
Calentamos 250 g de leche, con 250 g de nata o queso (según lo que hayáis elegido), 50 g de azúcar y 1 sobre de cuajada. Una vez que esté caliente, pero sin que hierva, lo mezclamos con el chocolate negro que hemos rallado previamente. Podemos utilizar una batidora.
Echamos este mezcla en una fuente redonda y honda (yo utilizo una de "Pirex" de 26 cm de diámetro y 5 cm de altura) y metemos en la nevera.
Preparamos exactamente igual la mezcla con el chocolate con leche. Comprobamos que la primera capa ya está sólida, rascamos superficialmente con un tenedor, al objeto de que se adhiera mejor la siguiente y echamos la segunda mezcla encima.
Hacemos lo mismo con el chocolate blanco, pero SIN AZÚCAR y repetimos la operación del molde.
Yo lo sirvo en el mismo recipiente en que la hago. Si queréis darle la vuelta, no tendréis ningún problema porque está muy sólida, pero os queda el chocolate negro hacia arriba.
Adornad por encima con chocolate rallado que habréis reservado.
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